Apacienta mis corderos, pastorea mis ovejas. (Jn 21, 15-19)

tumblr_m4ly2vcTXc1qesa9o

Lo bueno del Evangelio de hoy es la segunda parte. Pedro es débil. Vale. Nosotros todos no somos mejores que él. Vale. Pero lo más importante no es nuestra debilidad y mediocridad. Lo mejor es que, aun con eso, Jesús nos confirma en la fe y en el amor. Jesús sigue contando con nosotros. Jesús sigue mirando al futuro para construir el Reino y nosotros somos sus amigos, llamados a anunciar la buena nueva del Reino.

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.